¿Aprender seguridad vial?

Imagen: Office.com

Por: Guillermo Camacho Cabrera

Aún hace falta mucho para que la seguridad vial esté en las agendas de las personas. Ha sido un largo el camino para que empiece a aparecer en las agendas de los gobiernos. El tema ha estado vedado también en las agendas de los medios de comunicación, con unas que otras apariciones esporádicas cuando la pérdida de una vida (o de varias) se vuelve noticia.

Sin embargo, la pregunta que encabeza este escrito es perfectamente válida para el lector desprevenido, para quien debe cuidar una familia, administrar el desempeño de una comunidad educativa o aspirar a regir los destinos de una población, ciudad o país.

Recientemente, luego de una conferencia sobre seguridad vial para padres de familia en un colegio me comentó sorprendida la rectora, que había tenido siempre la idea de que hablar de seguridad vial era hacerlo exclusivamente acerca de las señales de tránsito y de la necesidad de respetarlas.

No se equivocaba la rectora al tener como primer referente de seguridad vial las señales de tránsito, pero cayó en la cuenta luego de tomarse el tiempo de escuchar amablemente la conferencia, de que el tema va más allá de la señal para trascender a la educación y al comportamiento.

Al concepto de límites y a la posibilidad de usar la comunicación apreciativa como un pilar en la educación en seguridad vial de padres de familia y de niños y niñas.

Por supuesto que es necesario que todos aprendamos seguridad vial.

De no ser por esta, solo unos pocos sobrevivirían al tránsito en las ciudades. Y aunque el porcentaje de personas que fallece en siniestros viales es relativamente pequeño (sus estadísticas se miden en tasas por 100.000 habitantes), recordemos que por ser lesiones de causa externa, todas las muertes en el tránsito son prevenibles.

Una sola muerte por siniestralidad vial debe llamar la atención de la sociedad. Mil mucho más. Un millón y medio al año en el mundo, como sucede hoy, debería ser suficiente para encender las alarmas.

Como una contribución al conocimiento de la seguridad vial promuevo desde hace varios años el curso virtual ‘Construyamos seguridad vial y cultura vial desde el colegio’.

Cotidianamente la gente pregunta por el horario del curso y respondo que este lo decide el estudiante. Dentro de las fechas o plazos del curso son los estudiantes, de acuerdo con sus tiempos, quienes deciden cómo le dedican al tema las diez horas semanales durante cuatro semanas que dura el curso.

La gran ventaja oculta de este curso es que, por ser una forma de Teleducación, no se requiere la presencia al mismo tiempo ni en el mismo espacio físico del tutor y del o la estudiante. Estos convergen asincrónicamente en el aula virtual.

El aprendizaje de la seguridad vial es posible y hay que aprovechar cada oportunidad, cada espacio y cada herramienta para aprender. Yo lo hago permamentemente.

cologuille

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s